Cansancio en el embarazo

Sí, chicas, el cansancio en el embarazo existe. Y os lo digo yo: una preñis de esas que hasta rabia doy, según me dicen, de lo bien que he llevado todas las etapas del embarazo, sin síntomas ni problemas ni ná de ná. Pero seamos realistas… En algo se tendrá que notar eso de estar gestando una vida preciosa en nuestro interior ♥

Pues resulta que no soy súper-woman 😂

Suena a coña, ¡pero va muy en serio! Conforme pasaba el tiempo y yo veía pasar un primer trimestre tranquilo y relajado, mínimas molestias; un segundo trimestre también bueno y apacible… Y no paraba de oír alrededor historias de embarazos más agitados, empecé a pensar: «¡como mola, soy súper-woman!».

Pero llegó el tercer trimestre, y con él un cansancio físico muy diferente a otras sensaciones que ya había experimentado.

Una embarazada activa

Sí, esa soy yo. No fit. Ni deportista. Activa.

Es justo que sepáis que trabajo sentada frente a un ordenador durante muchas horas al día, que muy healthy muy healthy eso no es que sea. Pero sí que soy una persona bastante activa en otros sentidos, y para que lo entendáis os pongo algunos ejemplos de las cosas que he ido haciendo durante mi embarazo:

• 4 viajes a Estados Unidos por trabajo, con estancias de 3-4 semanas cada vez, un montón de curro y amigos que visitar.
• 3 road trips de fin de semana en coche con amigos, y no han sido más porque no les cuadraban los días libres, las vacaciones y las pelas 😋
• 2 despedidas de soltera con sus respectivas bodas, aguantando como una campeona y a tope con los bailoteos.
• Visitar 789374612 casas en venta (ok, unas 15 en realidad jeje), ir a 7 bancos, elegir nuevo hogar, firmar hipoteca, y comprar… ¡Wow!
• 2 reformas de armarios, siendo yo «solo» la ayudante. Pero igualmente, vaya palizón de la muerte que me pegué… Gracias Andrés 😘
• 1 mudanza interminable, con autonomía preñil limitada y altos niveles de ayuda requerida. Sigo en ello xD
• 4 o 5 excursiones al agujero negro que es IKEA, que ya he perdido la cuenta, éstas siempre en compañía porque yo no podía cargar casi nada, claro.
• Montar 6987138972 muebles, o quizás alguno menos jeje, pero bastantes yo sola (despacito y con calma), y alguno con ayuda.
• 872782963 momentos y paseos con mi princesita perruna, también conocida como perrhija. Incluidas 2 cagaleras terribles para que en vez de dormir por las noches, limpies caca líquida de perro; y una lesión de patitas no grave, pero que me obligó a cargar sus 12kg de amor en brazos durante un par de días (con barrigón de 30 semanas).

No sé si os parecerá mucho o poco como resumen, pero yo creo que no está mal.

El cansancio en el embarazo

Vamos entonces a lo que nos ocupa. El leve cansancio que empecé a notar durante el primer trimestre, se fue acentuando un poco más en el segundo, cuando la barriguita se va convirtiendo en barrigota, y terminó de golpearme con fuerza durante la recta final del embarazo, en el tercer trimestre.

Es un cansancio físico al que me refiero, de sentir que tu cuerpo simplemente necesita estar tumbado, quieto, en reposo. Un cansancio que de repente hace que se te cierren los ojos, sin siquiera preguntarte, que no te deja ni hablar prácticamente. Un agotamiento extremo.

Yo lo comparo con una súper-resaca, con la diferencia de que con este cansancio no me encuentro mal ni me duele nada. Porque la cuestión es que mi cuerpo preñis sí que me deja pasar un fin de semana a tope, de aquí para allá, trasnochando, bailando, divirtiéndome; o limpiando, organizando y arreglando cosas si es el caso… Pero ya me lo he aprendido: después de la tormenta viene la calma, y no es una forma de hablar, ¡la calma posterior es indiscutible! Al día siguiente de uno de esos «excesos» no me puedo mover de la cama más que para ir al sofá, y del sofá a la cama de nuevo.

El calor en el embarazo

Que te coincida el último trimestre justo con los meses de pleno verano, con el calentamiento global, y en la costa alicantina, pues por un lado mola, pero por el otro no es lo más ideal 😅

Todo ese cansancio del que hablaba, con ese calor tan brutal que ha hecho, es como si se multiplicara por 100. No hacen falta esos supuestos «excesos» que comentaba antes para que te dé el bajón de energía.

En medio de este calor, cosas tan bobas como un paseo al sol, agacharte varias veces seguidas o subir una cuesta a pié, acaban contigo casi al momento. Un día haciendo la compra, incluso llegué a notar un pequeño-amago-de-inicio-de-mareo, que al final se quedó en nada. Pero desde entonces, excesivo calor y cansancio equivalen para mí a:

1. Parar.
2. Buscar sombra o aire acondicionado.
3. Sentarme o tumbarme hasta que recupero las fuerzas.
4. Comer algo según el tiempo que haga desde la última vez 🙂

El calor tiene definitivamente un efecto importante sobre el cuerpo  preñis, y prueba de ello es que cuando bajan un poquito las temperaturas me encuentro mucho mejor, y con más energía.

¡Cuídate!

A ver guapi, métetelo en la cabecita: estás embarazada, tienes a la cosita más preciosa del Universo dentro de ti y tienes que cuidarla ♥

Está bien ser activa, es sano para ti y para tu baby, pero no te pases, conoce tus límites y aprende cuando parar. ¡Yo lo he aprendido!

El cansancio en el embarazo es la forma que tu cuerpo tiene de pedirte una tregua, de pedirte mimos. Así que no seas cabezota, no te creas súper-woman, ¡y cuídate! Sobretodo en las últimas 2-3 semanitas del embarazo se nota mucho más la cosa: descansa, ¡y píllate la baja laboral si puedes!

Me apuesto lo que haga falta a que no soy la única que ha pasado por esto, ¿cómo habéis vivido vosotras o vuestras parejas el cansancio en el embarazo?